Avión de combate de gran peso y envergadura, el F-14 Tomcat
representa uno de los grandes logros de la compañía aeronáutica Grumman. El
atractivo aspecto del F-14 se debe en parte a sus alas en flecha variable y su
gran capacidad armamentística. Esta imagen ha quedado inmortalizada en
películas tan exitosas como Top Gun o videojuegos de guerra como el mítico After
Burner.
Proyectado como caza de defensa de la Marina estadounidense,
el F-14 no tardó en revelarse como avión de combate polivalente, apto para la
intercepción o el reconocimiento, para la escolta o el ataque.
Los primeros F-14 Tomcat despegaron en 1974 como reemplazo
de varios F-4 Phantom II en lo que sería el tramo final de la contienda
vietnamita. Brilló con luz propia en la década de 1980, en sendos
enfrentamientos contra el ejército aéreo de Libia en el Golfo de Sirte. Pocos
años después, durante la Guerra del Golfo Pérsico, el F-14 amplió campo de
operaciones, logrando un rotundo éxito como avión de reconocimiento.
Por encima de todo mérito, el F-14 Tomcat ha sido el avión
naval que mayor número de años ha servido activamente a la Armada de los
Estados Unidos: desde 1972 hasta 2006. En la actualidad, aunque retirado de
servicio, el Tomcat aún se utiliza en algunas bases norteamericanas como
vehículo de entrenamiento a futuros pilotos de las Fuerzas Aéreas.
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